Iniciamos lavando las naranjas y las zanahorias con agua corriente, luego les quitamos las cáscaras y la parte blanca de las naranjas.
Cortamos las naranjas en trozos pequeños y la zanahoria la cortamos en rodajas finas.
Añadimos las frutas cortadas en una sartén y le agregaremos suficiente agua para cubrirlas.
Llevamos la sartén a fuego medio y la cocinamos durante 20-30 minutos o hasta que veamos que las frutas esten tiernas.
Luego, retiramos la sartén del fuego y con la ayuda de una batidora o licuadora trituramos la fruta hasta obtener una mezcla homogénea.
Si lo desea es en este momento donde tienes que agregar el azúcar a gusto y mezclar bien.
Volvemos a llevar la mezcla a la sartén a fuego lento y la cocinaremos durante 15-20 minutos revolviendo ocasionalmente hastas que podamos ver que la mermelada adquirió la consistencia deseada.
Retiramos del fuego y dejamos que la mermelada se enfríe antes de guardala en frascos esterilizados y bien sellados.
Consejos adicionales
Utiliza naranjas maduras y jugosas, preferiblemente orgánicas, y zanahorias frescas y tiernas. Los ingredientes frescos garantizarán un mejor sabor y textura en tu mermelada.
Si la mezcla de naranja y zanahoria parece demasiado seca mientras se cocina, puedes añadir un poco de agua para ayudar a que los ingredientes se cocinen y se descompongan correctamente.
Una vez lista, vierte la mermelada caliente en frascos esterilizados y ciérralos herméticamente. Deja que se enfríen a temperatura ambiente antes de almacenarlos en el refrigerador o en un lugar fresco y oscuro.