Carameliza la cebolla
Pela las cebollas, córtalas en juliana y déjalas caramelizar en una sartén con 4 cucharadas de aceite. Retira y escúrrelas.
Prepara la masa
Coloca la carne picada, las yemas de huevo, el perejil, los ajos picados y la cebolla caramelizada en un cuenco grande. Salpimienta y mezcla bien con las manos. Añade el pan rallado y vuelve a mezclar.
Forma las albóndigas
Coge porciones de masa y forma pequeñas albóndigas. Corta el queso en daditos e introduce uno en cada albóndiga. Vuelve a darles la forma redonda y enharínalas.
Fríelas en aceite
Calienta una sartén con aceite y fríe las albóndigas por tandas, hasta que estén doradas. Déjalas escurrir sobre un plato con papel absorbente y reserva.
Cocínalas con el tomate
Vierte la salsa de tomate en una cacerola grande, añade las albóndigas y espolvoréalas con un poco de orégano. Caliéntalas unos minutos a fuego lento. Sirve caliente.
