Cuando se trata de preparar deliciosas recetas cotidianas, tu inestimable aliado no es otro que el horno. Este electrodoméstico es capaz de preparar suculentos platos en poco tiempo y con el mínimo esfuerzo. Sin embargo, después de cada uso, el horno suele verse invadido por olores persistentes y desagradables, difíciles de eliminar.
Sin embargo, no pierdas la esperanza, porque hemos explorado los métodos más efectivos para deshacerte de los olores no deseados que invaden tu horno.
1. Bicarbonato de sodio:
El bicarbonato de sodio es un valioso aliado para eliminar los malos olores persistentes en tu horno. Para utilizarlo, coge un bol que llenas con agua y dos vasos de bicarbonato de sodio. Luego colócalo en el horno precalentado a 180 grados centígrados.
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