¿Cómo podemos ser obedecidos sin gritar, sin repetir diez mil veces las mismas instrucciones? ¿Cómo imponernos suavemente en las formas, manteniendonos firmes en los principios? ¿Cómo lograr que los niños escuchen un poco más a menudo lo que los adultos les dicen? digamos, ¿en función de su edad o de su necesidad natural de afirmarse?
1 – SABER DISTINGUIR NECESIDAD Y DESEO “Todos los niños tienen necesidades fundamentales a las que los padres deben responder”, explica Nina Bataille: comer, beber, dormir, desahogarse, jugar, explorar, aprender, tranquilizarse… Otras, como tener Un caramelo o un móvil están a la orden del deseo. Satisfaga sus necesidades básicas, pero no ceda ante todos sus deseos. » Ambos padres deben compartir el mismo sistema de valores y apegarse a él. Por supuesto, las reglas pueden cambiar según el contexto (teletrabajo, invitados, etc.) y la edad del niño (¡que está creciendo!), como por ejemplo la regla para adquirir un smartphone.
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