4. Evite agitar
Dado que los refrescos son una bebida carbonatada, agitarlos puede provocar derrames y pérdida de dióxido de carbono. Manipule la botella con cuidado, evite agitarla y prefiera agitarla suavemente para mezclar la bebida si es necesario.
5. El truco de la botella al revés
Después de servir el refresco, cierra la botella con cuidado y colócala en el refrigerador con la cabeza hacia abajo. Esta técnica permite que las burbujas se alejes de la abertura de la botella, manteniéndolas dentro para mantener la carbonatación.
Si sigue estos sencillos consejos, podrá disfrutar de su refresco favorito con su efervescencia intacta en todo momento. Nunca dejes que un refresco sin gas te decepcione nuevamente y disfruta plenamente de esta bebida refrescante y espumosa. ¡Salud!