3 Técnica para reconocer si un huevo está fresco o podrido

Es una técnica que siempre se ha conocido y es tan formidable que ningún huevo puede mentirle. Prepara un recipiente grande con agua dulce y ¡boom! Sumerge el huevo y observa su reacción:

Fluye directamente: es fresco y se puede consumir sin problema.
Flota irremediablemente hacia la superficie: te dice claramente que lo has olvidado y que es mejor evitar comerlo.
Fluye, pero toma su tiempo: todavía es posible utilizarlo en una preparación con cocción, pero hay que evitar consumirlo crudo.
Por otro lado, puedes ponerlo con seguridad en un pastel o una tortilla.

Leave a Comment